Después de ordenar el retiro de 394 mil unidades la semana pasada, BMW anunció el retiro del mercado de otros 1,145 automóviles debido a un defecto en el inflador de los airbags que puede ocasionar graves daños a los conductores. De esta manera, a los modelos Serie 3 y Sport Wagon de los años 2006 a 2012 se les suman el Serie 6 Gran Coupé 2015, el Serie 5 Gran Turismo 2014 y los sedanes Serie 5 2014, entre otros vehículos llamados a revisión durante este mes.
Según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA), esta medida se debe a un defecto en los infladores PSDI-X fabricados por Takata que puede provocar la explosión del airbag del conductor durante su despliegue. Esto podría poner en riesgo tanto su seguridad como la de sus acompañantes ante la posibilidad de que fragmentos de metal salgan disparados desde el volante hacia el interior del automóvil.
Para solucionar este problema, al igual que con los automóviles retirados anteriormente, BMW reemplazará el airbag delantero del conductor sin cargo a partir del mes de septiembre. Mientras tanto, sus propietarios podrán seguir conduciéndolos hasta que el fabricante alemán se ponga en contacto con ellos para programar una cita en su concesionario local.
A continuación, la lista de modelos de BMW equipados con los infladores PSDI-X de Takata a los que se cambiará el airbag delantero del conductor de forma gratuita:
La crisis de infladores de Takata
Hasta declararse en quiebra en el año 2018, se estima que Takata poseía el 20% del mercado de bolsas de aire. Así, vehículos de marcas como Chrysler, Ford, Honda, Nissan y Toyota se vieron involucrados en el retiro de más de 100 millones de automóviles en todo el mundo, y algunos de sus modelos siguen estando equipados con infladores PSDI-X en la actualidad.
Estas piezas fueron fabricadas por Takata y no es la primera vez que son objeto de retiro. Por el contrario, son parte de una crisis que comenzó hace más de una década y ocasionó la muerte de 33 personas alrededor del mundo, con al menos 26 de ellas producidas en Estados Unidos.
Si bien estos componentes defectuosos llevan años causando lesiones de conductores y acompañantes, fue en 2020 cuando el conflicto cobró mayor relevancia. Tras un accidente ocasionado en Arizona, la NHTSA identificó una nueva muerte relacionada con la rotura de un inflador de airbag de Takata.
Dos años más tarde, en la que por ahora es la muerte más reciente vinculada a estos airbags, el inflador de un Honda Accord 2002 se rompió y sus partes hirieron la cara de un conductor en Kentucky. Ante esto, el fabricante aseguró que había intentado contactar al dueño del vehículo más de 300 veces, entre llamados telefónicos, correos electrónicos y postales.
LA NACION