La emblemática Rambla de Mar del Plata se convirtió en el centro de una disputa política y judicial. Guillermo Montenegro, intendente de General Pueyrredón, presentó una denuncia penal para desalojar una feria informal instalada en el lugar.
Este conflicto expone la tensa relación con el gobernador kirchnerista Axel Kicillof y pone en duda el futuro del histórico paseo.
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La feria ilegal y el reclamo del municipio
El municipio denuncia que la feria, instalada en la Rambla, representa un “riesgo cierto y serio” para la seguridad pública. Según informes de las áreas de Seguridad e Inspección General, en el lugar se cometen delitos y se vulnera la salubridad. Montenegro exige medidas concretas para resolver lo que es una clara inacción del gobierno provincial.
La administración de la Rambla, actualmente en manos de la Provincia, está en el centro del conflicto. El municipio asegura que el deterioro del lugarcompromete su estética y seguridad. Aunque la Provincia anunció obras de restauración, estas se realizarán después del verano 2025.
Contaminación y abandono
Otro eje de la denuncia radica en la falta de mantenimiento de las estructuras de madera, que son vulnerables a las inclemencias del clima. El municipio afirma que la feria informal genera residuospeligrosos, violando la Ley N° 24.051.
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En octubre, Montenegro propuso asumir el control de la Rambla y realizar obras mediante inversión privada. Sin embargo, la Provincia rechazó la propuesta. Según el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, las reformas ya están planificadas, pero se ejecutarán tras la temporada alta.
Punta Mogotes
El conflicto por la Rambla no es aislado. Punta Mogotes, otro espacio icónico de Mar del Plata, también es motivo de enfrentamiento entre el municipio y la Provincia. En agosto, Montenegro intentó recuperar el control del complejo, acusando a la administración provincial de abandono.
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Para lograrlo, el intendente canceló una deuda de 14 millones de pesos, buscando transferir la gestión del lugar al municipio. Sin embargo, la Provincia rechazó el pago, argumentando que la deuda no correspondía al municipio. Esto derivó en un nuevo enfrentamiento judicial.
Las estructuras del complejo, construidas en 1979, permanecen prácticamente intactas desde los años ‘80. Según Montenegro, el abandono de Mogotes refleja la falta de interés del gobierno provincial.
Obras postergadas y un verano sin cambios
A pesar de los reclamos, el gobierno bonaerense no planea ceder el control ni acelerar las obras. Las licitaciones recientes incluyen contratos publicitarios, pero las reformas para la Rambla y Punta Mogotes no comenzarán hasta después de la temporada 2025.