Argentina se encuentra en el centro de una disputa creciente entre China y Estados Unidos, que compiten por influencia geopolítica y económica en el Cono Sur.
Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el analista internacional, Alberto Ruskolekier, quien comentó que, “parece ser que Argentina es el jamón del medio o el jamón del sándwich”, al describir el delicado equilibrio que el país intenta mantener frente a las presiones de China y Estados Unidos. Ambas potencias tienen intereses estratégicos en territorio argentino, desde infraestructura crítica hasta presencia militar.
China, señaló Ruskolekier, ya tiene una base de observación espacial en Neuquén, “la única fuera de su territorio, y operada completamente por personal chino”. Esta instalación, conocida como Bajada del Agrio, cubre 200 kilómetros cuadrados y posee una antena parabólica de 35 metros de diámetro.
Las represas del sur y la presión china
Además del componente espacial, China mantiene inversiones millonarias en infraestructura energética. “China desea continuar con la financiación de dos represas enormes en Santa Cruz: la Jorge Cepernic y la Néstor Kirchner”, indicó el entrevistado. El proyecto ronda los 4.800 millones de dólares, pero desde 2022 los desembolsos están congelados por razones políticas.
El analista advirtió sobre las consecuencias de depender demasiado de créditos chinos: “No vaya a ser que le pase a Argentina lo que le pasó a Sri Lanka”, donde China se quedó con el control de un puerto por 99 años ante la imposibilidad de pago.
El control de la hidrovía: clave del comercio
Otro frente de interés chino es el control de la hidrovía Paraná-Paraguay, fundamental para el comercio argentino. “Por ahí pasa el 80% del comercio internacional exterior del país”, subrayó. La licitación de su concesión por 30 años podría otorgar a una empresa china un poder estratégico en la región.
A esto se suma el swap financiero con China, que representa alrededor de 20.000 millones de dólares. En 2023, ante la incertidumbre por el nuevo gobierno, “China con una actitud inteligente decidió no romper los puentes con Argentina y renovó el tramo de 5.000 millones”, recordó Ruskolekier.
La contraofensiva norteamericana
En respuesta, Estados Unidos refuerza su estrategia. “Estarían bastante avanzadas las negociaciones para instalar una base militar en Ushuaia, financiada por el Pentágono”, afirmó el experto. Esto generó alarma en sectores que ven en ello una cesión de soberanía, ya que la base sería operada por personal norteamericano.
Este interés se vinculó con la Antártida, zona clave para el futuro geopolítico. “La proyección hacia la Antártida es fundamental para los intereses estratégicos norteamericanos”, sostuvo Ruskolekier. La instalación de la base permitiría a EE.UU. tener una posición avanzada en la región austral.
Intereses permanentes, no aliados eternos
El entrevistado recordó que “los países no tienen amigos permanentes ni enemigos permanentes, solo intereses permanentes”. En este contexto, Argentina intenta equilibrar relaciones, pero la presión es creciente. Mientras Milei se muestra más cercano a EE.UU., no ha roto completamente los lazos con China.
Finalmente, Ruskolekier reveló un dato sensible: “Estados Unidos estaría dispuesto a asistir económicamente a Argentina si atraviesa una crisis importante”.