La decisión de Miguel Ángel Russo de marginar del plantel profesional de Boca a Marcos Rojo, Cristian Lema y Marcelo Saracchigeneró un sismo en el club y desató intensos debates mediáticos. En ese marco, Oscar Ruggeri aportó su mirada con duras críticas al manejo de la situación y lanzó advertencias sobre las consecuencias que puede tener una ruptura interna de este tipo.
«El grupo está lleno de tipos grosos. Tenés que ir de frente, ser sincero. La explosión es con los grandes, te explotan los tipos grosos. Si hubiese sido Saracchi solo, ni estaríamos hablando de esto«, comenzó Ruggeri en el programa F90 de ESPN, aludiendo al peso específico de Rojo, uno de los referentes señalados por el cuerpo técnico y el Consejo de Fútbol.
Ruggeri fue más allá y sugirió que la decisión tuvo el aval directo de Juan Román Riquelme: «Lo cortan de arriba. ¿Sabés cómo termina esta historia? El equipo debe tener cinco o seis jugadores que bancan a Rojo y el resto se la termina agarrando con el entrenador. ¡No lo arreglás más! Si él se quiere ir a Estudiantes, dejalo ir. Si a mí me hacían esto, te volvía loco«.
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Según trascendió, los futbolistas separados se entrenan en otro vestuario desde el miércoles en el Boca Predio, una medida que también alcanza a Chiquito Romero, aunque el arquero permanece con el grupo por cuestiones contractuales. En contraste, Rojo, Lema y Saracchi fueron directamente desplazados de las prácticas colectivas.
El Cabezón también opinó sobre el escándalo con Miguel Merentiel, quien fue reemplazado en el entretiempo del partido ante Huracán y reaccionó con evidente fastidio. «Cuando uno llega al vestuario hacemos silencio un ratito, porque en el momento estás caliente. Después bajás y hablás. Pero si Merentiel insultó a Russo, se terminó ese vestuario. Hay un lío bárbaro y cada uno hace lo que quiere«, afirmó el ex defensor.
Sobre la cadena de conflictos, Ruggeri no dudó en señalar a la conducción: «Está bien que castiguen a Merentiel, pero hay 10 ayudantes y alguien tiene que ver que Merentiel sale al campo. Esto es claro: Riquelme maneja el club, nadie se le va a meter adelante. Entonces, bajá y hablá: deciles a Rojo, Lema y Saracchi que se vayan. Si no, van a seguir echando técnicos«.
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Y concluyó con una sentencia lapidaria sobre la figura del entrenador: «Para mí, los jugadores ya lo apuntaron a Russo después de lo que pasó con estos pibes. Esto no se arregla más. Me sorprende que desde el primer día Miguel no se siente con Riquelme y le diga que liberen a Rojo«.