El magnate Elon Musk retomó una demanda contra OpenAI, acusando a sus cofundadores, Sam Altman y Greg Brockman, de traicionar la misión fundadora de la empresa especializada en tecnología de Inteligencia Artificial (IA).
Este caso judicial contra el fabricante del robot conversacional ChatGPT, es «una historia clásica de altruismo versus avaricia», alega la demanda presentada en un tribunal federal del estado de California. «La perfidia y el engaño son de proporciones shakespearianas», sentenció el reclamo de Musk, dueño también de la red social X.
La presentación de la denuncia por parte del multimillonario cofundador de fabricante de vehículos eléctricos Tesla y dueño de la aeroespacial SpaceX se produce casi dos meses después de que retirara abruptamente de los estrados judiciales una demanda similar contra OpenAI, Altman y Brockman.
Musk, quien en 2018 abandonó OpenAI, acusa a los responsables de la empresa con sede en San Francisco, de fraude, conspiración y publicidad engañosa.
En la demanda se alegó que Musk originalmente invirtió en OpenAI en 2015 con el entendimiento de que sería una organización sin fines de lucro, pero Altman lo «manipuló y engañó», y finalmente unió fuerzas con el gigante del software Microsoft, su principal inversor desde 2019.
«Altman le aseguró a Musk que la estructura sin fines de lucro garantizaba neutralidad y un enfoque en la seguridad y la apertura para el beneficio de la humanidad, no de valor para los accionistas», se indicó.
En ese sentido, la demanda de Musk resaltó que ese cambio se aprecia en que OpenAI acabó siendo «valuada recientemente en la asombrosa suma de 100.000 millones de dólares» y sus responsables se vieron «injustamente enriquecidos».