El proyecto de Presupuesto 2025, elaborado por el Gobierno de Javier Milei, mantiene y amplía las reducciones de partidas observadas este año para políticas que apuntan a la disminución de las brechas de género y que protegen a las niñeces. Un análisis realizado por el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) y la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) detectó tanto reducciones que ponen en riesgo la continuidad de programas como la eliminación completa de partidas presupuestarias que garantizan herramientas fundamentales. Por ejemplo, para el Programa Acompañar, que otorga un subsidio por seis meses a víctimas de violencia de género para que puedan salir de esa situación, y para el fortalecimiento de la Educación Sexual Integral el presupuesto es cero. Tampoco hay partidas identificadas para la Línea 144 donde se brinda información o asesoramiento en casos de violencia machista. Eso puede significar dos cosas, aclararon las ONGs: o no hay transparencia en la información de la asignación de recursos, lo que dificulta su monitoreo; o se eliminan esos programas en el 2025. De aprobarse como fue enviado al Congreso el Presupuesto 2025, “significaría un grave perjuicio para mujeres, niñas y adolescentes en toda su diversidad”, denuncian las ONGs. Al analizar ciertos gastos tributarios, vemos que no es cierto que “no haya plata”. En todo caso, hay una distribución injusta de los recursos”, advierten.
En el documento “Presupuesto 2025 – Una distribución injusta de los recursos para mujeres, niñas y adolescentes”, ACIJ y ELA ponen la lupa sobre el proyecto que envió el Poder Ejecutivo al Congreso. El informe será presentado este martes en la reunión informativa convocada de 11 a 13 por la Comisión de Mujeres y Diversidades de la Cámara de Diputados, que encabeza la diputada Mónica Macha, de Unión por la Patria.
Otros de los hallazgos sobre el proyecto de Presupuesto 2025 son los siguientes:
* Una reducción del 27 por ciento real para el Plan ENIA –el programa más exitoso para reducir el embarazo no intencional en adolescentes de la historia Argentina creado durante la gestión macrista–, respecto al presupuesto vigente de 2024 y del 78 por ciento en comparación con 2023.
* Una disminución del 30 por ciento para el fortalecimiento edilicio de jardines infantiles, en comparación con el presupuesto vigente 2024. Pero la reducción llega al 68 por ciento respecto al ejecutado en 2023 y al 85 por ciento respecto del máximo histórico alcanzado en 2021.
* La única partida que registra aumentos –entre las destinadas a acortar las brechas de género– son las vinculadas a políticas alimentarias. En los casos de AUH y AUE ascienden a 7,81 por ciento respecto al presupuesto vigente del 2024 y a 65,64 por ciento si se compara con el presupuesto ejecutado en 2023, mientras que la Prestación Alimentar se incrementa 25,94 por ciento respecto al presupuesto de este año y 4,59 por ciento en relación al ejecutado en 2023. Sin embargo –advierten las ONGs–, el Poder Ejecutivo propone eliminar el ajuste automático de estas prestaciones, lo que dejaría a las familias bajo dos riesgos: la posibilidad de reducciones por decisiones discrecionales y la pérdida de valor debido a la inflación.
Por otra parte, ELA y ACIJ señalan que si la inflación en 2025 supera el 18 por ciento previsto en el Proyecto, como sugieren varias estimaciones, entre ellas el Relevamiento de Expectativas de Mercado del BCRA, las partidas presupuestarias tendrían caídas aún más fuertes que las que se estiman en el informe.
“Lo que estamos viendo con el análisis del proyecto de Presupuesto 2025 son dos cuestiones preocupantes: la primera es que hay un retroceso en la transparencia y acceso a la información que obstaculiza el seguimiento que podemos hacer desde la sociedad civil en materia de inversión para reducir la desigualdad de género. Un ejemplo de ello es que la línea 144 ya no tiene una partida propia y no sabemos cuánto se va a invertir en su fortalecimiento. Si pensamos en que este año se echó al 38 por ciento de las personas que trabajaban en la línea y que ya teníamos un recorte del 28 por ciento en su ejecución durante el primer semestre, las proyecciones no son alentadoras”, comentó a Página 12, Delfina Schenone Sienra, directora del área de Políticas de ELA.
Además, Schenone advirtió que hay programas que se están desfinanciando “de forma drástica” como el programa de desarrollo de la salud sexual y la procreación responsable donde se incluye el Plan ENIA de prevención del embarazo adolescente no intencional por ejemplo. En ese programa la disminución llega al 64 por ciento en relación al 2023.
“En definitiva, lo que vemos es que hay un recorte drástico en las partidas de género, sobre todo en las que involucran la prevención y atención de las violencias. Este proceso de desfinanciamiento comenzó este año y vemos una consolidación con el nuevo proyecto, lo cual deja a las mujeres en Argentina en una situación de mayor desprotección y con muy pocas herramientas para poder vivir una vida libre de violencias. En un informe reciente que publicamos donde monitoreamos el estado de las políticas de violencia desde que asumió Milei nos preguntábamos si el gobierno estaba dejando libradas a su suerte a las mujeres en situación de violencia y con este nuevo análisis podemos decir que la respuesta es un rotundo sí”, concluyó Schenone.