La situación de la «low cost» no deja de complicarse y el Gobierno prevé duras sanciones por el mal servicio. Polémica por el uso de un taller suspendido
09/12/2024 – 12:16hs
La política de «cielos abiertos» que viene promoviendo La Libertad Avanza (LLA) atraviesa una instancia de turbulencias por efecto de los malos rendimientos de Flybondi, una de las compañías «low cost» que más viene pronunciándose en sintonía con el Gobierno. La empresa está en el ojo de los cuestionamientos a raíz de sus continuos vuelos cancelados o reprogramados, con un promedio de servicios afectados que podría ascender al 45% sólo este mes, según fuentes oficiales. De acuerdo a la Administración Nacional de la Aviación Civil (ANAC), la firma ostenta un promedio de casi el 27% en términos de vuelos afectados por algún tipo de cambio en lo que va de 2024.
En ese marco, el oficialismo reconoce que implementaría un régimen de multas del orden de los $200 millones si la compañía no modifica sus deficiencias operativas. Al mismo tiempo, LLA podría suspenderle varias rutas a la «low cost» y hasta se baraja la posibilidad de que Flybondi pierda su Certificado de Explotador de Servicios Aéreos (CESA), lo cual le impediría seguir operando como aerolínea.
En las últimas horas, la situación de la compañía incluso se complicó aún más tras no acatar una decisión de la ANAC que impuso la suspensión de uso del taller de mantenimiento que la aérea posee en Ezeiza.
Flybondi: polémica por el uso indebido de un taller de mantenimiento
Según trascendió, el organismo impuso el veto a la utilización del área el pasado 4 de octubre, pero la firma igual habría llevado a cabo mantenimientos más allá de la suspensión establecida.
Se señala que la empresa realizó trabajos sobre sus aeronaves LV-KDR, LV-KDQ y LV-KEF en dicho taller. Ya el 24 del mismo mes, la ANAC exigió a Flybondi que aplique lo dispuesto.
«Es importante mencionar que dicha suspensión se encuentra vigente, toda vez que la misma no ha sido levantada aún bajo ninguna comunicación oficial en tal sentido. Asimismo, tampoco se han emitido de parte de Flybondi formularios Form IMFBP FB 020 (Informe de Mantenimiento Fuera de la Base Principal) a dichos fines», se indicó en ese momento.
Respecto de los motivos de la suspensión, la ANAC tomó la decisión luego de comprobar irregularidades en la forma en que la aerolínea registró sus mantenimientos, falta de orden general en los depósitos y ausencia de trazabilidad de los repuestos, entre otros aspectos.
Si bien la dependencia oficial levantó la suspensión el 14 de noviembre, lo cierto es que la Administración Nacional de la Aviación Civil prevé realizar nuevas inspecciones para revisar si la compañía cumplió con los cambios exigidos en el espacio de mantenimiento. En torno al oficialismo señalan que la «low cost» recibiría otra multa de envergadura si se comprueban nuevas irregularidades en Ezeiza.
La combinación de todos estos elementos mantiene en situación de suspenso el destino comercial de Flybondi, que viene de presentar un esquema de «regularización» de sus servicios tras el aviso del Gobierno de que aplicará sanciones graves contra la empresa por las continuas falencias operativas.
Flybondi presentó un plan de «mejoras» que no convence
En torno a la Secretaría de Transporte reconocen que, al menos hasta ahora, el plan acercado por la compañía el último día de la semana pasada no permite suponer una rápida mejoría del servicio de Flybondi en el corto plazo. Y que la posibilidad de aplicar sanciones terminaría de cobrar forma en el transcurso de este mes.
El malestar en las filas de LLA responde, también, a que la «low cost» es observada por el mismo Gobierno como una de las compañías a las que más se les «perdonaron situaciones complejas» a lo largo de 2024.
Así, Flybondi transcurrió la primera parte del año con dificultades financieras, falta de repuestos y otros inconvenientes derivados del contexto macroeconómico y de control del tipo de cambio.
En el Gobierno sostienen que a cada una de estas dificultades se respondió con relativa «comprensión», y que incluso luego se fijaron políticas que de algún modo acercaron oxígeno a la firma. Por ejemplo, se abrió la posibilidad de que la empresa opere con aviones y tripulaciones del exterior.
Nada de esto redundó en una mejora en los servicios, siempre según LLA, y de ahí el fin de una «paciencia» que ahora daría pie a sanciones y la posibilidad cierta de que la «low cost» quede en tierra si no optimiza sus operaciones.