Pepe Mujica, quien fuera presidente de Uruguay entre 2010 y 2015, será sometido este viernes a una nueva intervención médica. La operación busca mejorar las dificultades que enfrenta para alimentarse, consecuencia de un cáncer de esófago diagnosticado a principios de año.
Raquel Panone, médica de cabecera del líder del Movimiento de Participación Popular (MPP), declaró al medio uruguayo Telemundo: “Detectamos que la estenosis del esófago había empeorado, por lo que se decidió colocar un stent para ensanchar el conducto”. La intervención permitirá que Mujica, de 89 años, pueda ingerir líquidos y alimentos con mayor facilidad.
En junio, el exmandatario completó un tratamiento de radioterapia que le dejó secuelas en el esófago, dificultando su capacidad para alimentarse. Panone estimó que Mujica permanecerá internado un par de días antes de recibir el alta médica.
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Pepe Mujica: una historia de resiliencia
A pesar de su estado de salud, Mujica ha demostrado su espíritu combativo. En septiembre pasado, enfrentó su cuarta internación en menos de dos semanas debido a complicaciones relacionadas con la fibrosis esofágica provocada por la radioterapia. En ese momento, se le realizó una gastrostomía para asegurar una alimentación adecuada mientras su esófago se recuperaba.
Incluso en medio de sus problemas de salud, Mujica no dejó de participar activamente en la política. En agosto, asistió a un acto del Frente Amplio, apenas horas después de ser dado de alta. “Estoy deshecho y perdiendo la vida, pero tenía que estar”, afirmó entonces, según declaraciones recogidas por The New York Times.
La figura de Mujica sigue siendo emblemática en Uruguay y en la región, destacándose por su humildad y compromiso con las causas sociales, incluso en los momentos más difíciles de su vida personal.
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