Saná, 27 dic (EFE).- El aeropuerto internacional de Saná reanudará sus operaciones este viernes, un día después de que fuera alcanzado por ataques aéreos israelíes, informó a última hora del jueves la Autoridad de Aviación Civil y Meteorología de Yemen (CAMA), controlada por los rebeldes hutíes alineados con Irán.
«A pesar de los ataques directos contra el aeropuerto, la autoridad afirma que sigue cumpliendo con su deber de restaurar el aeropuerto para aliviar el sufrimiento de los ciudadanos yemeníes, incluidos los pacientes, los varados, los estudiantes y los hombres de negocios, y que el aeropuerto volverá a funcionar mañana viernes por la voluntad de Dios», dijo CAMA en un comunicado.
Los cazas israelíes «dirigieron varios de sus misiles contra el equipo de navegación, la torre de control del tráfico aéreo y otras partes del aeropuerto civil, lo que provocó su destrucción», agregó.
Entre las víctimas causadas por los ataques se encuentran personal del aeropuerto, tripulaciones de vuelo, personas que recibían a los pasajeros y un miembro de la tripulación de un avión de las Naciones Unidas.
«Esto constituye una violación flagrante de todas las leyes, pactos, tratados y convenciones internacionales», dijo CAMA, añadiendo que el ataque contra el aeropuerto era «equivalente a un castigo colectivo de los pacientes y viajeros civiles yemeníes».
Según el Ministerio de Salud controlado por los hutíes, los bombardeos israelíes acabaron con la vida de al menos tres personas e hirieron a otras 30 en el aeropuerto, mientras que el ataque contra el puerto de Al Hodeida dejó otros tres muertos y diez heridos.
La aviación israelí lanzó un ataque «basado en inteligencia» contra infraestructuras utilizadas por los hutíes en el aeropuerto de Saná, las centrales energéticas de Hezyaz y Ras Kanatib y otras posiciones en los puertos de Hodeida, Salif y Ras Kanatib, en la costa oeste, según un comunicado militar israelí.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró que Israel persistirá «hasta completar la tarea» de neutralizar a los hutíes de Yemen, mientras que los insurgentes prometieron venganza y afirmaron que su respuesta «no se hará esperar» y que «la agresión israelí no quedará impune». EFE